La pregunta de si Lionel Scaloni puede ser el DT de Boca en 2024 surge por varias razones. La primera tiene que ver con el anuncio que hizo el actual técnico de la Selección sobre su futuro en ese lugar; la segunda con que el Xeneize busca entrenador; y la tercera con la buena relación que hay con Juan Román Riquelme.
Las dudas quen planteó Scaloni tras ganarle a Brasil en el Maracaná encendieron las alarmas. En primer lugar de los hinchas, que llenaron de mensajes las redes sociales pidiéndole que viniera a Boca. Y en segundo orden en el Consejo de Boca y Riquelme.
Por más que la cabeza hoy esté en la clasificación a la Libertadores del año que viene y en las elecciones del 2 de diciembre, que el técnico campeón del mundo pueda llegar a quedar libre en enero y con el banco Xeneize libre tras la renuncia de Jorge Almirón (Mariano Herrón sería interino nada más que hasta diciembre) no es poca cosa. Es una tentación, sin dudas.
A todo eso, por supuesto, se le suma la relación casi de amistad que existe entre Scaloni y Riquelme, algo que no es menor. Sobre todo por el trato diario que suele tener y tuvo el vice de Boca con los entrenadores que por ahora pasaron por su gestión.
Scaloni y Boca en 2024: la relación del DT y de su cuerpo técnico con Riquelme
La buena relación de Riquelme con Scaloni es posta. Quedó una amistad de épocas en donde compartieron la camiseta de la Selección. De hecho, el 10 lo invitó a su despedida al otro Lionel, que se dio el gusto de jugar y de abrazarlo a JR en la Bombonera.
También es real la buena relación de Riquelme con todo el cuerpo técnico de Scaloni. Con Aimar son amigos desde muy jovencitos, aunque ambos defendieron camisetas distintas; con Samuel fueron campeones y referentes de la época de Carlos Bianchi en Boca; y con Ayala quedó un gran recuerdo de la Selección, en donde por ejemplo disputaron juntos el Mundial de Alemania 2006.
Es más, Riquelme dejó clara la buena onda con todos ellos en el Argentina-Uruguay de las Eliminatorias Sudamericanas en la Bombonera, cuando bromeó con ellos, empujó a Samuel en chiste y se abrazó con el resto.
En definitiva, no es un hecho la renuncia de Scaloni a la Selección, como así tampoco lo es que sí o sí Riquelme lo llamaría para ser el DT de Boca en 2024. Pero, al menos a la vista, razones sobran.