Fue el viernes, en la llegada de Boca a Salta. Un nene se filtró entre los policías y los vallados, llegó a Marcos Rojo y se largó a llorar de la emoción mientras abrazaba a su ídolo. La imagen se viralizó y hasta provocó la respuesta del capitán en las redes sociales. Pero después pasó lo que pasó, la lesión en el calentamiento y el dolor. De todos los hinchas y de ese chiquito también. Tanto que grabó un video con mensaje de aliento para difundirlo a través de Bien Bosteros.
"Hola Marcos Rojo, soy Tiziano el de Salta. Soy el chico que vos bajaste del micro, te abracé y lloré. Tuve mucha emoción. Te deseo pronta recuperación. Acá los Bosteros te estamos dando fuerza fuerza fuerza. Para que vos te recuperes de tu lesión y sigas muchos años en Boca y no te vayas a otro equipo", dijo.
Tiziano tiene siete años y, cuando se enteró que Boca iba a jugar en Salta, no dudó en pedirle a su mamá Luciana que lo llevara a la puerta del hotel para tratar de ver a sus ídolos. Y se dio el abrazo con Rojo y el saludo a Advíncula, que le regaló la gorrita. "Justo había un hueco y logró pasar. No lo puede creer, llegó al colectivo y tiritaba. 'Calmate hijo, calmate', le decía yo. De la emoción le agarró fiebre, lo tuve que llevar a la salita", cuenta mamá Luciana.
Además de Tiziano y Luciana, desde el mediodía en la puerta del hotel Sheraton estuvieron su papá Alexis, la tía Mercedes y su primo Rodrigo, quien también pasó y ligó la gorria de Luca Langoni.
Boca, rojo y la bombonera
El momento tuvo tanta repercusión en el barrio Lavalle de Salta que los vecinos los saludan y los felicitan. "En la plaza lo reconocieron y le regalaron mil pesos, en el barrio todos me dicen que lo vieron. Y un chango de la comparsa de Lavalle hasta le regalaron una entrada. Fue con el papá a la cancha".
Tiziano no sólo es hincha de Boca, sino que además es muy fanático de Rojo. Tal vez por la influencia de su abuelo y su tío que siempre le dicen que se parece al capitán xeneize. "En la peluquería del barrio vamos y le decimos 'el corte de Marcos Rojo'", dice Luciana.
"Hasta el momento no puede creer lo que pasó. Cumplió un sueño y me lo agradeció, no se va a borrar nunca más el abrazo de Rojo, que le decía 'no llorés por favor'", agrega.
Ahora, claro, después de cumplir un sueño que creía imposible, Tiziano cuenta que le gustaría conocer la Bombonera y de ser posible ver un partido allí, pese a la difícil situación económica que atraviensan luego de un problema de salud que sufrió su papá. "Su sueño es ir a la Bombonera, él ve en la tele y dice: 'Mamá mirá lo que es eso'".