Todo le pasó. Pero todo en serio. En el partido entre Boca y Unión por la fecha 10 de la Copa de la Liga, Marcos Rojo hizo su gol número siete en Boca a los siete minutos y luego, sufrió una lesión muscular sobre el final del primer tiempo.
El capitán arrancó con todo, aprovechando el rebote que dio el arquero Moyano luego de un cabezazo de Edinson Cavani. Y la mandó a fondo del arco para abrir el marcador en la Bombonera. La revisaron en el VAR, demoró unos minutos y al final se lo dieron.
El gol siete a los siete para los hinchas de Boca lleva a ilusionarse, en el tren de coincidencias que llevan todas a la Séptima. La Séptima y ansiada Copa Libertadores de la historia del club.
La paradoja es que Rojo no podrá estar el 4 de noviembre en el estadio de Maracaná en la final ante Fluminense. Porque fue expulsado en la semifinal de vuelta con Palmeiras en Brasil. Y ese partido tan esperando tendrá que verlo desde afuera.
Rojo también llegó a un segundo gol a los 30 minutos con otro cabezazo, pero sin necesidad de revisar en el VAR se lo anularon por una clara posición fuera de juego.
Y el primer tiempo del capitán se completó con la lesión en el aductor a los 42 minutos. Hubo gestos de dolor, señas, y cambio para el complemento. Con Nicolás Valentini en su lugar, como seguramente ocurrirá en la final de la Libertadores. Marcos rojo, gol y lesión...