Es uno de los referentes futbolísticos. Uno de los que integran el podio de los más ovacionados en cada presentación en la Bombonera. Pero nada resulta sencillo y libre de sacrificio. Luis Advíncula lo sabe bien y lo confesó en estos días: "Boca me cambió mucho".
"Es complicado el manejo de la presión. Con los años uno va aprendiendo, he trabajado con psicólogos y con coachees para tratar de canalizar mejor lo que es la presión en Boca. Pero es una presión linda, porque no te podés relajar un segundo, porque si lo hacés tenés un compañero que espera para entrar. Uno aprende a convivir con esa presión", contó el Rayo en una charla con Doradobet.
"Cuando no clasificamos al Mundial me pegó muy duro. En ese momento no había trabajado con los coachees, y me pegó durísimo. Soy bastante pasional y trato de no demostrar mi sentimiento. La asesoría en el fútbol es muy importante en la carrera de cualquier jugador", agregó.
Advíncula hoy se encuentra con Perú a la espera del último amistoso antes de la Copa América en Estados Unidos. Por lo cual se perderá los partidos ante Vélez y Almirante Brown, y en caso de llegar a las semifinales también la ida de playoff de la Copa Sudamericana.
Advíncula al confesionario: "Boca me cambió mucho"
"Boca me cambió mucho. Yo en Madrid estaba en mi zona de confort, estaba con mis hijos, viviendo en una ciudad donde tenía todo a la mano. Y venir para Argentina fue un cambio de 360 grados. Llegar a Boca fue una gran decisión, porque fui a pelear grandes cosas a un equipo grande. No me arrepiento un segundo de la decisión que tomé".
"Boca es un equipo donde tenés mucha presión, no te podés relajar un segundo, y menos con los equipos de menor jerarquía, porque al ganarle a Boca salvan todo el año. Boca te da gloria, te da jerarquía, te da prestigio, reconocimiento".