Chiquito Romero es el abanderado del sueño de Boca. El arquero volvió a hacerse gigante en la tanda de penales vs Racing y metió al Xeneize entre los cuatro mejores de América.
El misionero de 36 años contuvo los penales de Gonzalo Piovi y Leonardo Sigali y solo recibió un gol en la definición, de parte de Juanfer Quintero. Al igual que en la llave ante Nacional, ya les había adelantado a sus compañeros que atajaría dos penales. En especial, a Piovi. Y sus guantes resultaron clave para la definición de la serie.
"Todo el mundo sabe que yo soy hincha de Racing, pero que hoy me debo a Boca y tengo que hacer las cosas para que a Boca le vaya bien. Para eso vine a este club, para demostrarle a todo el mundo que soy un arquero que está vigente. Y trato de hacer todos los días lo mejor para Boca", dijo Chiquito Romero, el abanderado del sueño de Boca.
El próximo desafío será Palmeiras, primero en la Bombonera y luego en Brasil. Chiquito atraviesa su mejor momento en Boca y el equipo lo siente. En los penales es una garantía. Y está decidido a seguir haciendo historia.