Siempre fue su sueño. Desde el día en que dejó su trabajo como entrenador en las Inferiores de Boca. Siempre imaginó el día en que volvería al club para agarrar la Primera. Y lo consiguió luego de un camino en el cual recorrió las distintas categorías del fútbol argentino. Desde Ituzaingó en la D al club más popular de todos. Y esa primera charla de Diego Martínez cara a cara con las figuras xeneizes dejó una linda anécdota.
"El día que arrancamos las prácticas, me iba imaginando cómo iba a ser la charla con un plantel como el de Boca. Así como en su momento había visualizado ese primer contacto con los jugadores de Ituzaingó. Pero esta vez fue distinto, porque fue muy fuerte levantar la mirada y ver a Edi, a Sergio, a Marcos...", arrancó Martínez en una entrevista en La Oral Deportiva.
"Uno trata de tener un mapa de lo que quiere decir. Pero en ese momento se me mezcló todo y no recuerdo lo que charlamos. Por eso después les pregunté a los chicos del cuerpo técnico si no había dicho ninguna pavada", agregó el Gigoló.
Para Martínez es tal vez el desafío mayor conducir a futbolistas de enorme trayectoria como Romero, Rojo y Cavani, además del resto de las figuras de Boca. Y por el momento lo va llevando muy bien, con gran relación con todos ellos. Siempre consciente de ese desafío, claro.
"Es muy importante para nosotros como cuerpo técnico. Nos exige a mejorar y que la vara después sea tratar a todos como lo hacemos con Cavani. Pero también con Sergio o Marcos. Tenemos la obligación de estar a la altura de ellos y eso nos ayuda a crecer", completó el DT que lleva ocho partidos oficiales al frente de Boca.