La triple competencia lleva a no parar nunca. Un partido tras otro. Con la agenda muy cargada. Por eso, la decisión que tomó Jorge Almirón tras la derrota 1-0 de Boca con Defensa y Justicia por la cuarta fecha de la Copa de la Liga.
La seguidilla es intensa por estos días y, como el Xeneize debe volver a jugar este martes ante Central Córdoba en Santiago del Estero, el entrenador no dio descanso a su plantel y organizó un entrenamiento este sábado por la mañana en el predio de Ezeiza.
Boca jugará el martes a las 18.45 como visitante en Santiago y volverá a hacerlo el sábado a las 18.30 frente a Lanús en la Bombonera, ambos por las fechas 5 y 6 de la Copa de la Liga.
Esos serán los últimos partido antes de enfrentar a Palmeiras por las semifinales de la Copa Libertadores, que se disputarán los jueves 28 de septiembre y 5 de octubre, primero en La Boca y después en San Pablo.
En la práctica de este sábado, los futbolistas que estuvieron de entrada en Florencio Varela realizaron trabajos regenerativos, con especial atención en Cristian Medina, quien salió con una molestia en un aductor, y también en el Colo Barco por su corte en un pómulo producto de un codazo no sancionado por el árbitro.