Siete jugadores de Boca que volvieron de los préstamos se movieron aparte en el primer día de entrenamiento. Este martes, Diego Martínez inició su era al frente del plantel xeneize pero decidió trabajar solo con aquellos jugadores que tienen asegurada su continuidad en el plantel.
Son varios los jugadores de Boca que volvieron de los préstamos y que deben definir su futuro. Muchos de ellos son juveniles, aunque hay otros casos que valen la pena ser analizados. Futbolistas que vienen con recorrido y que bien podrían quedarse a pelear por un lugar.
Siete de esos futbolistas trabajaron de manera diferenciada en la vuelta del Xeneize a las prácticas. Ellos son Aaron Molinas (Tigre), Gonzalo Maroni (San Lorenzo), Renzo Giampaoli (Quilmes), Maximiliano Zalazar (Platense), Agustín Obando (Tigre), Gabriel Vega (Godoy Cruz) y Lucas Brochero (Arsenal).
El caso más llamativo es el de Molinas, que fue dirigido por Martínez en Inferiores y luego pedido como refuerzo en el Matador. Maroni, a su vez, redondeó un buen semestre en el Ciclón y también esperaba tener una chance. Giampaoli, en tanto, destacó en el Cervecero pero la superpoblación de centrales (Figa, Rojo, Valentini, Molinas, Valdez y Lema) lo dejaría sin oportunidades.
En principio, continuarán entrenándose con un Profe a la espera de nuevas ofertas. La idea de Boca es negociarlos o cederles a algún equipo competitivo. Los más buscados son Molinas, Maroni y Giampaoli.
Otro jugador que no trabajó con el grupo fue Frank Fabra. El colombiano, que volverá a ser padre, solicitó un permiso especial para incorporarse un día más tarde a la pretemporada. El lateral, que no terminó bien el 2023, estuvo de vacaciones en Colombia y se espera que este miércoles diga presente en Boca Predio.