Llegó a Boca en un momento complicado y en menos de siete meses lo llevó nada menos que a una final de América. Jorge Almirón está muy cerca de hacer realidad el sueño de todo entrenador. En 2017 saboreó la gloria con Lanús, pero cayó con Gremio de Porto Alegre, el cuco de aquella edición. Ahora, con el buzo de Boca, Almirón irá en busca de su primera Copa Libertadores este sábado ante Fluminense.
Este viernes, Almirón reconoció el campo de juego del Maracaná y brindó una conferencia de prensa en la previa del Boca-Fluminense. "Está dura, mucha arena...", dijo el DT apenas pisó el césped del estadio junto a Edinson Cavani, el futbolista que lo acompañó en su encuentro con la prensa. Luego, el entrenador encaró los micrófonos y contó sus sensaciones a 24 horas de la final.
Almirón recordó su experiencia en la Copa Libertadores 2017 con Lanús, en la que cayó en los dos partidos: 1-0 en Brasil y 2-1 en la Fortaleza. "En ese momento eran dos partidos, primero en Gremio, después en Lanús. Hoy es una final a un solo partido, en este estadio mítico. Los jugadores son conscientes de lo que representamos, tenemos que abstraernos un poco de lo que pasa. Hay muchos chicos del club, otros grandes que saben jugar estos partidos, y después muchos que son de las entrañas del club y son hinchas", contó.
Almirón tiene el equipo para la final Boca-Fluminense
Almirón pareciera tener todo claro. A diferencia de otros partidos, el DT repitió el equipo en los últimos entrenamientos y todo parece indicar que no habrá sorpresas. "Venimos jugando este partido hace mucho tiempo. Jugamos contra un gran equipo que no va a cambiar su forma de jugar. Tenemos nuestras fortalezas. Imagino un partido donde los van a intentar jugar, cerrado. Me imagino el partido de mil maneras, son muchos los momentos, el inicio, la euforia, todo lo que representa la final. Hay gente de experiencia que lo hace bien. Se pasan muchas cosas por la cabeza, pero estoy seguro de que el equipo está a la altura. Me deja tranquilo que llegamos sin lesiones, salvo lo de Zeballos que nos duele a todos. Llegan todos bien, sabiendo lo que tienen que hacer. Después es fútbol, ojalá que se alinee todo", expresó.
Y se mostró confiado de jugar en el Maracaná. "¿Se puede contar lo de las butacas?", le preguntó a Cavani. "No sé...", respondió el uruguayo, a lo que Almirón agregó: "Recién vimos que las butacas están pintadas de azul y amarillo, es un muy lindo estadio. Además, contó que tiene "varias promesas" por cumplir en caso de lograr la Séptima.
La fe de Almirón para la final en el Maracaná
"Soy un hombre de fe. La gente me deja mensajes positivo. Lo mejor es la preparación, de ver a los jugadores bien. Nos preparamos mucho para esto. Más allá de la promesa lo importante es la gente, la movilización, esperemos poder regalarles una alegría enorme", tiró.
Por último, Almirón se hizo eco del mal momento que les tocó atravesar a los hinchas de Boca en Río y pidió por la seguridad de todos. "La sensación es de dolor, tristeza y preocupación, porque nuestras familias estaban en camino. Sé que no es el grueso de la gente. Muchos viene acá de vacaciones, es un país maravilloso. Son dos hinchadas fuertes, es la mayor movilización de la historia. Vienen a apoyar desde donde les toca. Boca es un club enorme, hay gente que no va al estadio e igual representa a su club. Ojalá que se pueda controlar, es un evento que lo mira todo el mundo. Que no pase más", deseó.