Mereció más. Muchísimo más. Pero en el fútbol, a veces, no siempre gana el mejor. Y Boca, que tuvo todo para ponerse arriba en la serie, irá por otra épica en la Libertadores vs Palmeiras en Brasil. El equipo de Almirón igualó sin goles ante el Verdao y deberá jugarse la ropa el próximo jueves en San Pablo. Sí, igual que en 2000 y 2001, y con antecedentes a favor.
Boca fue superior de principio a fin. Manejó más y mejor la pelota, generó las situaciones más claras y hasta pudo haber goleado ante un Palmeiras timorato que prácticamente no atacó. Solo Cavani pudo haber metido cuatro, tres en el primer tiempo y otro en el segundo, mientras que Merentiel contó con la más peligrosa del partido y convirtió un gol en el complemento anulado por foul previo.
Era la noche ideal. El escenario perfecto para sacar una ventaja en casa y viajar con mayor tranquilidad al Allianz Parque. Sin embargo, la pelota no quiso entrar. La salida de Barco (entró Janson), para colmo, le quitó fluidez al equipo cuando más la necesitaba. Ante un Palmeiras sólido, Boca se repitió en centros al área y, aunque tuvo aproximaciones, no pudo doblegar el arco del Verdao.
Boca, por otra épica vs Palmeiras en Brasil
Ahora, Boca deberá definir la serie en Brasil, del mismo modo que en las Copas del 2000 y 2001. En el 2000, el equipo de Carlos Bianchi había empatado 2-2 la final de ida en la Bombonera y terminó consagrándose por penales gracias a las brillantes atajadas de Óscar Córdoba.
Un año después, Boca volvió a enfrentar a Palmeiras en las semifinales de la Libertadores y otra vez se llevó la victoria. ¿El resultado? El mismo: 2-2 en el Templo y triunfo por penales en Brasil. En 2018, en tanto, Boca también eliminó a Palmeiras en semifinales aunque de manera menos ajustada: 2-0 en Buenos Aires y 2-2 en San Pablo.